Importancia del sol para las plantas

El planeta tierra está habitado por millones de seres vivos con características distintas cada uno. El hombre por naturaleza es curioso y se ha interesado en estudiarlos. Por esta razón surgen las clasificaciones del mundo natural.

Importancia del sol para las plantas

Importancia del sol para las plantas

En el reino plantae o vegetal encontramos a las plantas, que realizan un proceso sin el cual nosotros no podríamos vivir denominado fotosíntesis. Para que este proceso que nos mantiene vivos se lleve a cabo, las plantas necesitan la clorofila.´

Fotosíntesis y luz solar

La clorofila es un elemento que se puede encontrar en las hojas con una pigmentación color verde, razón por la cual los árboles y plantas llevan el distintivo color. Su importancia radica en que es responsable de realizar la transformación de la luz, que es proveniente del sol.

Ciertamente la luz solar funciona como una radiación electromagnética que es retenida por la clorofila en las plantas. No obstante, no es lo único que influye en la fotosíntesis.  El agua que se obtiene por el tallo de la planta, el dióxido de carbono y los minerales de la tierra, también afecta el crecimiento del vegetal.

Vida en la energía lumínica

El astro más grande y centro de nuestro sistema solar propicia la vida en la tierra. Para nosotros no es solo el calor que nos brinda o su luz radiante los elementos esenciales para la existencia de los seres vivos, también lo es la energía luminosa que emana de él.

La energía lumínica es aquella que el proceso fotosintético de las plantas absorbe. Posteriormente, esta energía se transforma a química, lo cual contribuye a su desarrollo. Es decir, son organismos autótrofos porque producen elementos que la ayudan a crecer.

¿Mucha o poca luz?

Existe distintas clases de plantas y no todas necesitan la misma cantidad de luz solar, ni de la misma manera. Por ejemplo, el cactus es una planta preparada para habitar en sitios calientes y secos, por lo que requieren ser expuestas a dosis altas de luz.

Por otro lado, plantas como la violeta africana no exigen muchos rayos solares. Su clímax de luz ideal es término medio para poder florecer, mientras que las plantas como los helechos prefieren lugares donde haya poco alcance de luz solar.


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